Existe una sinergia clarísima entre el mundo de la competición y los vehículos de calle. Las 24 Horas de Le Mans son el ejemplo perfecto del laboratorio de pruebas que representa una competición donde la innovación y la tecnología son argumentos que pueden hacer ganar a las marcas. En el marco de este evento se develó el Mission X, un prototipo del cual se puede hablar mucho a pesar de ser un estudio de diseño, por el momento.
Exigir durante 24 Horas a cualquier componente dentro de un auto es una de las pruebas más difíciles que se pueden hacer en cuanto a durabilidad y confiabilidad de los sistemas. Es por ello que hemos visto el resultado de estas pruebas en el desarrollo de componentes como los frenos carbono cerámicos o las transmisiones de doble embrague.
ANTECEDENTES
De todas las marcas que suenan cuando uno habla de la importancia de Le Mans en el mundo automotriz, Porsche es una de las que más resalta. El fabricante alemán se mantiene como el más ganador en los 100 años de historia de la carrera, es el único fabricante que ha participado de manera ininterrumpida desde hace más de 60 años e incluso su primera participación fue su primera victoria en 1951 con un 356 SL.
El intercambio de tecnología entre los prototipos de Le Mans y los super autos de Porsche ha sido constante desde el inicio. En la historia reciente, basta recordar al 956 y al 962, de cuyos motores derivó el que montó el 959, el primer superauto de la historia y el más veloz de la década de los ochentas; aún cuando el concepto fuera orientado para competir en el Rally Dakar. También se convirtió en el primer auto de producción en montar neumáticos runflat e incluso control de presión para los mismos.
Otro de los autos que tienen un vínculo con Le Mans es el Carrera GT, proveniente del desarrollo del Porsche GT1 o incluso el 918, cuyo V8 estaba basado en la arquitectura del RS Spyder de competencia, además de que fue el primer auto de serie legal para calles en romper la barrera de los siete minutos en dar una vuelta al mítico “Infierno verde” de Nürburgring. Parte de las optimizaciones que se desarrollaron para el 918 de calle en cuestión de los componentes híbridos funcionaron como base para el 919 Hybrid, que años después ganó Le Mans.
LLEGA EL MISSION X
Con la nueva era llegó el Porsche 963 y el Mission X, y aunque el primero tuvo momentos complicados durante la competencia este fin de semana pasado, fuera del circuito quien brilló con más fuerza fue el Mission X. Se trata de un estudio de diseño que toma la silueta de un prototipo de Le Mans, interpretando lo que puede ser el futuro del hiperauto según la marca de Stuttgart, justo en el marco de su 75 aniversario.
Comenzando por el diseño, toma elementos del propio 963 en algunas proporciones, sobre todo hablando de silueta, aunque se propone su construcción en un monocasco de fibra de carbono con mucha aerodinámica activa. De hecho, si trasciende a la producción, Porsche promete una carga aerodinámica mayor a la del actual 911 GT3 RS, uno de sus vehículos más impresionantes de los últimos años.
Las puertas están inspiradas en el 917 de los años setenta y la apertura se realizaría en el esquema de mariposa, como aquel auto en el que compitió Pedro Rodríguez. Por otro lado, los faros delanteros ofrecen una evolución en cuanto a los cuatro elementos lumínicos, ahora dispuestos de manera vertical.
Pasando al interior, destacan los asientos integrados al monocasco de fibra de carbono, en los que se podrán montar paneles de piel ajustados a medida del conductor. Vemos también dos pantallas como única interfaz para saber información sobre el desempeño y operar el sistema de infoentretenimiento. Se considera una tercera pantalla con un cronógrafo firmado por Porsche Design.
Finalmente, en cuanto a desempeño no se han develado detalles clave sobre lo que podría montar el Mission X de convertirse en un modelo de producción, pero llega con la promesa de convertirse en el auto de calle más rápido en recorrer una vuelta a Nürburgring Nordschleife, tener una relación peso-potencia de 1:1 y ser 100% eléctrico.
A continuación te dejamos una galería con el Mission X y algunos de los Porsche que han transferido tecnología entre el mundo de la competición y las calles.
